El futuro del storytelling
El storytelling es la argumentación que hacemos para definir cómo vamos a construir la comunicación de una marca. Lo habitual es dotar de valores a la misma en base a su trayectoria y la versatilidad que podrá tener para definir una segmentación de público interesado en el producto o servicio.
Pero en ocasiones (y cada vez más) lo excesivo de comunicar historias encajonadas o previsibles conduce a un mundo entendido, donde la sorpresa no existe y por lo tanto las marcas no aportan ni seducen. En este punto creemos es importante trabajar.
Las marcas y organizaciones tienen, además de lo que ofrecen, un componente social que no figura en las estadísticas finales de rendimiento, pero que sí impacta en la percepción a mediano y largo plazo. El desafío es uno: vivir la historia que se cuenta e incorporar los valores de esa experiencia en su comunicación.
El storytelling deberá cruzar los caminos donde las ideas se encajonan (y se parecen unas a las otras) para ir detrás de donde se esconde la historia, de donde está el público. Adoptando una actitud reactiva frente a los análisis que se hacen del impacto social que puede tener lo que vendemos y convertirse así en una herramienta para la comunicación de valores que contribuya a la mejorar la sociedad en que vivimos.
En un mundo donde la calidades se equiparan y la variedad de oferta es muy amplia en la mayoría de los rubros, este es el objetivo del nuevo desafío: que el usuario encuentre, además del beneficio del producto, un alcance de valores que contribuyan ya no solo a cubrir sus necesidades, sino a incorporar un componente activo para el mejoramiento de la persona como tal, el conjunto social y (cada vez más) el cuidado del medio ambiente. Todo un mundo de cambios para el storytelling.
Por Luciano Verdi, Lic. en Comunicación Social