Camino a Rusia 18: los números que hacen al marketing de la redonda
¿Por qué Rusia organiza un Mundial? ¿Por qué lo hizo Sudáfrica y EEUU? ¿Por qué lo hará Qatar? ¿Por qué en las próximas décadas se nominará a Australia y China, todos países con una muy baja tradición por el fútbol y en los que este deporte es secundario? Más allá de los supuestos procesos fraudulentos en las que están envueltas algunas de estas nominaciones, lo cierto es que estos países quieren sí o sí tener su mundial. Y no es para menos.
A nivel mundial, el fútbol mueve un estimativo de 500 mil millones de dólares por año. Para tener una mejor idea basta con decir que Argentina, que es la 20° economía mundial, tiene un PBI anual de 580 mil millones de dólares, apenas mayor. Cada uno de los restantes 174 países del mundo generan menos riqueza que el fútbol.
El Mundial de Rusia repartirá entre los 32 participantes 791 millones de dólares. De los cuales 8 millones a cada uno por participar, 38 al ganador, 27 al segundo, 24 al tercero y así. En 2014 Argentina se embolsó 25 millones por llegar a la final. Ese mismo año, más de 3 mil millones de personas vieron el mundial por televisión. Sin contar las miles que fueron a los estadios. Ese número es prácticamente la mitad de la población mundial, la cual se estima cercana a los 7 mil millones. Junto a los JJOO no hay evento de cualquier tipo más masivo que este. El dinero que se recauda es tanto, que la FIFA se puso de buenas este año y destinará fondos para cubrir los gastos operativos de cada selección (por separado de los ocho millones por participar) y, por si eso fuera poco, creó un fondo común para los clubes que prestan sus jugadores. El mismo se trata del monto de 8 mil dólares por día que el jugador esté participando en el mundial, lo que da un desembolso de unos 180 millones de dólares que la FIFA destinará para este fin, denominado «El Programa Beneficios para los Clubes de la FIFA». El beneficio se extenderá desde dos semanas antes al partido inaugural del Mundial Rusia 2018 hasta el día después de la eliminación del equipo. Ah, y hay un seguro especial por si se lesionan. Con estos números, podemos decir, que si Colombia y Uruguay llegan a octavos de final de la copa, el club Boca Juniors, recibirá por tres colombianos y un uruguayo que van a ir al mundial, considerando un mes de competencia (contando la etapa previa) 960 mil dólares, casi un millón. Para entender aún mejor el impacto de este dinero, Felix Orode, nigeriano que juega en Sportivo Barracas, tiene posibilidades de ir al mundial para su selección. 8 mil dólares por cada día de Felix en el mundial le pueden significar al club un superávit jamás pensado.
Además del impacto económico para cada club, está el impacto cultural. El turismo que visita las sedes no solo consume fútbol, sino que el mundial es la excusa perfecta para empaparse en el país anfitrión y sus costumbres. En el último Mundial de Brasil, 6 millones de personas se movilizaron en avión entre las distintas sedes, solo por nombrar un dato. Este año, Rusia recibirá una nueva edición y por primera vez la competencia, mirando de reojo un poco más a estos números que a cómo hará para que su selección no haga un papelón.
Por Luciano Verdi, Licenciado en Comunicación Social